top of page

6 Ventajas de usar el Design Thinking para potenciar tu negocio


¿Quieres dejar tu huella con un negocio con mayor sentido? ¿Quieres desarrollar una nueva línea de productos o servicios? ¿Quieres tener más clientes y hacerlos más felices?

El design thinking (pensamiento de diseñador), es una metodología para generar ideas innovadoras, que satisfagan a los usuarios que usen los productos o servicios desarrollados; colocándolos en el centro de su creación al hacerlos partícipes de dicho proceso.

A continuación, te comparto 6 ventajas de utilizar esta metodología:

1) Aumentar la probabilidad de que el potencial cliente se convierta en cliente. Al hacer partícipe al usuario (quien en el caso de tu negocio será tu potencial cliente), las posibilidades de entregar una solución a sus problemas o necesidades por las que estaría dispuesto a comprarte aumentan. Esto porque podrás ir testeando tu idea constantemente hasta obtener un producto o servicio valioso para ellos.

2) Minimizar riesgos. Al estar enfocado en encontrar una solución a un problema real, disminuyes el riesgo de crear e invertir en un proyecto altas sumas de dinero por algo que nadie estará dispuesto a comprarte.

3) Accionar ante la incertidumbre. Dentro de los principales miedos al emprender o generar una nueva línea de productos o servicios, es la incertidumbre que genera el potencial resultado ante nuestra oferta, y que ésta sea negativa. Al cambiar el foco centrándote en el cliente, asumes un rol proactivo y generas acciones concretas para disminuirla.

4) Trabajar colaborativamente. Esta metodología implica un cambio de paradigma y apunta a trabajar de manera colaborativa al estar en constante contacto con otras personas para entender los problemas y para buscar opciones y soluciones. De esta manera potencia el trabajo en equipo en tu empresa y con el/los clientes.

5) Ayudar a otros rentabilizando tu negocio. Al dejar al cliente en el centro con el foco de identificar sus necesidades, tendrás un negocio que ayudará a otros, lo cual será gratificante y al mismo tiempo que puedes rentabilizar esa ayuda.

6) Mejorar la comunicación. Si estás con la mente abierta desde la empatía y buscando feedback, es casi una “obligación” comunicarte con los equipos o usuarios, y para entenderlos y poder reflejar ese entendimiento, mejorarás tu comunicación.

¿Cuáles son las etapas del proceso de design thinking? Te las comparto a continuación:

1) Empatizar: hace relación con entender las necesidades y preocupaciones de los usuarios implicados en aquello que queremos crear. Para esto es importante observar y ponerse en sus zapatos. Entender el mundo como él/ella lo ve, para así luego pensar en una potencial solución.

2) Definir: esta etapa apunta a hacer una declaración del problema que presenta ese usuario, para ir enfocándose en potenciales clientes particulares. Es importante considerar todo aquello identificado en la primera etapa, identificando un problema real y significativo.

3) Idear: en esta etapa empiezas a bosquejar y diseñar diferentes opciones que buscan solucionar el problema de tu potencial cliente. Deja que fluya tu imaginación, sin pensar en si las ideas son buenas o malas. Permítete crear sin privarte, porque a veces somos nosotros mismos quienes empezamos a “matar” nuestras ideas antes de que vean la luz.

Usa imágenes, dibujos… el canal visual aquí es muy importante.

4) Prototipar: aquí es cuando llevas tus ideas a la realidad. Aquí es cuando es momento de seleccionar opciones y llevarlas a la realidad para que tu potencial cliente pueda visualizar claramente la solución a su problema.

5) Testear: en esta etapa es cuando tu potencial cliente prueba tu solución (productos o servicios). Aquí es cuando podrás ver la respuesta a tu solución y por lo tanto entregará información útil para mejorarlo.

No tengas miedo al feedback “negativo”, piensa que estarás implementando una nueva forma de desarrollar productos, y por lo tanto esta retroalimentación es lo que realmente estás buscando, para aplicar las mejoras y volver a iterar.

Este proceso se repite de manera tal que puedas obtener feedback y dar con la solución adecuada. No es un proceso lineal, sino que la idea es que vayas viendo lo que se requiere repetir según la retroalimentación que vayas obteniendo.

Podrás usarlo con nuevas ideas de negocio, nuevos productos o servicios e incluso con clientes internos en tu empresa… ¡Mucho por donde ganar!

Ahora… ¿De qué manera incorporarás esta metodología en tu empresa?

¡Compártelo en los comentarios!

Un abrazo,

María José Rivera

PD: Si quieres potenciar tu negocio a través de programas personales o grupales para tu emprendimiento o empresa, escríbeme a mjrivera@goupcoaching.com y coordinemos una reunión.

Si buscas un programa para ti, puedes postular a una sesión aclaratoria haciendo click aquí

Comments


bottom of page